Cuando hablamos de aspectos externos a la pareja, nos referimos a todas aquellas situaciones sociales, familiares y laborales que rodean como sistema a toda persona y en este caso a toda pareja.

Se suman círculos al sumarse personas, una pareja une círculos familiares y de cercanos y amigos, con quienes se han compartido y se compartirán momentos personales y de pareja.

La idea es que todo lo que este alrededor de la pareja sume, y no reste. Cuando esta máxima no se cumple es cuando la pareja comienza a vivir problemas que vienen de fuera de la relación y se filtran al interior de esta, afectando a la confianza y la complicidad que se tiene con la pareja.

Un tema importante será el tema de los limites, es decir, que espacio es mío, cual es nuestro o de la pareja, y cual es para compartir con los demás a solas, o en pareja.

Cuando no se estipulan bien estos espacios, es cuestión de tiempo que hayan problemas en la relación a causa de no haber sabido cuidar del espacio propio, o de la pareja.

En consulta se mirarán todas las variables externas implicada y a su vez, los factores personales que han hecho que sucediera tal problema: inseguridades, dependencias emocionales familiares, priorizarse uno a priorizar a la pareja, querer mantener una vida de soltero a nivel de hobbies  sin ceder algo de espacio al crecimiento de la pareja.

Normalmente es una problemática que se trabaja en pareja, ya que requiere de una sincronía entre ambos miembros de la relación. De todas maneras es un factor que puede trabajarse individualmente si no se tiene pareja, para mejorar en esta aptitud previamente a volver a tener pareja.