Sexta visita con «A.»: Duelo y Resiliencia
Ps- Que tal han ido estas dos ultimas semanas?
Tienes alguna duda de lo que trabajamos en nuestro anterior encuentro?
A.- Al principio no muy bien, me quedé movida con lo que hablamos en la última sesión.
Me ha afectado el tema de ver las cosas negativas con tanta fuerza y el ser consciente que no es lo normal para todo el mundo.
Lo que me ha ido bien ha sido ir haciendo la actividad estar conectada al mundo, y centrarme en todo lo que pasaba ante mi, y no solo en lo que me hacía estar mal.
Poco a poco voy consiguiendo ver que puedo romper el bucle, cada vez con mas facilidad, aunque me cuesta.
Ps- Has encontrado alguna cosa que te haya dificultado conseguirlo en alguna situación?
Mi ex me envió un mensaje y comenzaron a volver los recuerdos de sus mentiras y la sensación de tristeza, ver lo positivo del momento, me costó y realmente no pude, me quedé atrapada en la tristeza y en la rabia, en la frustración que sentía en ese momento.
Ps- Bien, hoy hablaremos sobre la emoción natural ante una perdida, ya sea una pareja, un familiar, un trabajo, o un proyecto de vida. Nos centraremos en el proceso de elaboración de un duelo, que suele gestionarse entre los 6 meses y los 2 años, posteriores al momento de la pérdida. La duración de este proceso psicológico y emocional dependerá del tiempo que necesitemos hasta llegar a la Aceptación y Superación de la perdida de aquello que en primera instancia no hubiéramos querido perder, de aquí que cueste aceptar ese presente al que uno se enfrenta.
DUELO: Lo desgranaremos en 5 fases.
Fase 1 – Shock – Cuando somos conscientes de la perdida, nos sentimos desubicados, perdidos y de alguna manera no podemos conectar ni a nivel racional ni emocional con lo que esta sucediendo. No podemos creerlo.
El «mecanismo de defensa» de característico de esta fase es la NEGACION*, «no me puede hacer esto», «es imposible», «se habrá equivocado»
Fase 2 – Desesperanza – Afectivamente conectamos con la realidad, nos sentimos tristes, si pensamos en momentos del pasado sentimos melancolía, y si se mantiene en el tiempo puede detonar en una depresión. Sólo somos capaces de ver lo bueno de la otra persona, sentimos que queremos recuperar a toda costa lo que ya no tenemos en nuestra vida.
El «mecanismos de defensa» de la desesperanza es: IDEALIZAR LO PERDIDO y CULPARSE EN PRIMERA PERSONA DE LO SUCEDIDO – uno retroalimenta al otro.
Nos Culpamos de todo lo sucedido.
Fase 3 – Rabia – En esta fase es cuando conectamos a nivel racional con lo que nos ha sucedido, es cuando somos capaces de ver la parte de responsabilidad de la otra parte y no solamente la nuestra, como sucedía en la anterior fase. Esta rabia bien canalizada es constructiva, es un motor para el cambio, para preparar la siguiente fase.
Lo que suele suceder en esta fase es justo lo opuesto a la anterior.
El «Mecanismo de Defensa» de la Rabia, es PONER LA CULPA A FUERA, CULPABILIZAR AL OTRO.
la culpa pasa a ser en gran parte del otro.
(Tanto la fase de rabia como la de desesperanza se van alternando, en lo que denominamos FRUSTRACIÓN, hasta que poco a poco va perdiendo fuerza, como algo destructivo, y comienza a ser la base para la siguiente fase, la Aceptación).
Fase 4 – Aceptación
Una vez hemos conectado a nivel afectivo y racional con lo sucedido y situados en el presente que tenemos ante nosotros, comienza la fase mas creativa o de crecimiento.
Cuando hablamos de aceptación, no significa estar de acuerdo, sino aceptar que la realidad es la que es y no se puede hacer nada para cambiarla.
En esta fase, comenzamos a conectar con el mundo, a reconstruir nuestras relaciones cercanas, a crear nuevas rutinas, a descubrirse en el momento actual.
Después de cada perdida la persona ya no es la que era, ha evolucionado, en parte gracias a este proceso de crecimiento que supone el duelo.
Comenzamos a ver sentido a nuestra vida como lo que es: una oportunidad para hacer cosas nuevas, tener hobbies, relacionarse con la gente de siempre y abrirse a nuevas personas con las que compartir nuevos momentos.
Esta fase esta directamente relacionada con la RESILIENCIA, o lo que es lo mismo, con la capacidad de adaptarse positivamente a las situaciones adversas que hayamos padecido, saliendo reforzados y creciendo con ello.
Una vez aquí, donde uno se reinventa en el momento actual, estamos preparados para pasar por la última fase del duelo: la Superación.
Fase 5 – Superación
Llegados a este punto donde hemos pasado por malos momentos para después reconstruirnos y crear un presente que nos gusta y que es totalmente diferente al pasado del que venimos, podemos estar contentos, hemos superado esa perdida que nos acongojaba, y nos hacia perder el norte, habiendo resurgido como una mejor versión de uno mismo, ya que de los errores, en todos los sentidos, se aprende.
Somos conscientes de que hemos superado un duelo, cuando nos sentimos en paz al saber de la otra persona o de aquello perdido.
Incluso hay quien se alegra de saber que a la otra persona le va bien, justamente porque uno en primera persona se siente mejor que nunca.
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Al finalizar la sesión, invito a A. a que durante las próximas dos semanas identifique las fases por las que va pasando, para así ganar autoconciencia del momento por el que está transitando, y entienda que es parte del proceso sentirse triste o enfurecido, pero que no es una emoción que dure mas allá de un tiempo determinado, cuando uno se permite conectar con ella, y a su vez que no sea la emoción la que dirija la voluntad de la persona, como dijimos al principio, .
Cuanto antes se ponga en marcha, antes superará las diferentes fases por las que ha de transitar para superar el momento presente y salir fortalecida.
Quedamos en vernos en dos semanas, para que pueda desarrollar en estos días la capacidad de introspección a nivel emocional y para que sea capaz de hacerse preguntas que responder, o que nos pongamos en marcha para responder el próximo día que nos veamos en consulta.