“La tendencia natural del ser humano es la de evitar el dolor”, explica Estévez, “sustituir la acción que deberíamos acometer por algo que nos desconecta o no nos genera el mismo estrés, o preocupación (los ‘distractores’ o acciones no tan importantes y con menor carga de exigencia) es un mecanismo de defensa de tipo evitativo”. Sheila Estévez, psicóloga especialista en conflictos emociones, junto con otros profesionales nos explica como gestionar emocional y racionalmante la procrastinación.  SEGUIR LEYENDO EN DIARIO EI PAÍS – Smoda