Sí, ‘ser Psicólogo’ es desempeñar un rol, así que voy a comentar desde el punto de vista personal cómo vivo mi profesión en el día a día, donde lo mas importante es ‘ser muy humano’.
Creencias:
Existen diversas orientaciones dentro del mundo de la psicología, aunque hay un desconocimiento generalizado, ya que cuando preguntamos a alguien ‘qué es un psicólogo’, se tiende a asociarlo generalmente con la especialidad clínica – la disciplina que estudia los trastornos de la conducta -, que es el la vertiente que se ha hecho más popular gracias a los medios, y la más estrechamente relacionada con el psicoanálisis y Sigmund Freud.
Menos conocidos son los psicólogos especializados en recursos humanos o en bien en coaching. También los hay que estudian los fenómenos sociales, desde la psicología social; los que colaboran con neurólogos desde la rama de neuropsicología, o bien los psicólogos que se dedican a nuevas especialidades como por ejemplo la Gestalt o el Minfulness, que se focalizan en el crecimiento personal, entre otras ramas existentes dentro de esta disciplina.
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Hay quien afirma lo siguiente:
“Los psicólogos estudian esa carrera porque tienen algún problema»
Como en todas las carreras hay gente con problemas, y, cómo no, en la carrera de psicología no iba a ser menos, hay que admitirlo, por eso es importante hacer un trabajo personal y ser supervisado regularmente ante algunos casos, donde una meta-visión facilita el transito hacia la curación de la persona que viene a buscar en nosotros un guía o una ayuda.
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El caso es que ciertamente hay quien decide estudiar psicología con el principal deseo de poder conocerse mejor, que no está mal. Pero si es el único motivo que ‘te mueve’ a estudiar esta carrera… mal augurio, y más en una profesión tan vocacional como lo es esta.
Cabe añadir que forma parte de nuestra naturaleza la inquietud por conocerse, y es probable que más de uno haya tenido alguna vez este pensamiento, por el simple hecho de ser seres racionales, y con capacidad de introspección. Aunque una cosa está clara:
Es preferible acudir a consulta e intentar solucionar tus preocupaciones de esa forma, por dos motivos: uno es que irás directo al tema a tratar, y el otro que te ahorrarás muchos años de estudio en asignaturas que probablemente te sean indiferentes.
«Los psicólogos somos personas con una vida emocional, unas veces con problemas y otras sin ellos»
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Aunque no mostremos en sesión nuestras emociones, en pro de la objetividad y no juicio, el terapeuta queda en un segundo plano, las tenemos a flor de piel, ya que como he dicho ‘hay que ser muy humano para ser psicólogo o psicoterapeuta. En sesión lo que cuenta es lo que trae la persona que tenemos ante nosotros.
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En nuestro día a día nos equivocamos, como todo ser humano, y puede suceder que precisemos de ayuda de otro terapeuta a la hora de gestionar situaciones propias, o para darnos una visión externa y objetiva de cosas que nosotros vivimos a nivel personal y subjetivo. De aquí nuestra imposibilidad para gestionar ciertos temas en nosotros mismos por mucho autoanálisis y muchas herramientas que tengamos.
Es importante ser humilde y buscar ayuda cuando se precisa: es lo más honesto con nosotros mismos y con nuestros pacientes, para evitar que algo interfiera en los procesos que estemos llevando a cabo.
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Lo que sí que depende de nosotros los psicólogos es el cuidado de nuestra felicidad y bienestar para poder transmitirla a nuestros pacientes: si no se tiene, por mucha energía que se ponga en ello, no se consigue transmitir. Es algo actitudinal e inconsciente.
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‘Como todo ser humano, el psicólogo no está inmunizado de los problemas del día a día, aunque es cierto que por lo general, nos los tomamos con una sonrisa’
